Casimiro IV Jagiellończyk nació el 30 de noviembre de 1427 en Cracovia, y falleció el 7 de junio de 1492 en la misma ciudad.
Fue hijo de Jagiełło con su cuarta esposa, la reina ucraniana Sofiia Holshanska. Casimiro se convirtió en el gran duque de Lituania en 1440, y rey de Polonia en 1447. Adoptó una política centralista en cuanto al trato con las tierras ucranianas, favoreciendo a los nobles Católicos Lituanos del Gran Ducado de Lituania.
Abolió el Reino de Volhynia en 1452 y el Reino de KYiv en 1470. En 1481 descubrió una conspiración de los reyes ucranianos liderada por Myjailo Ololkovych, y los ejecutó. Otros reyes le transfirieron su lealtad y tierras a Moscovia.
Durante su reinado los Tártaros de Crimea, vasallos del Imperio Otomano en ese entonces, reanudaron sus incursiones, destruyendo Kyiv en 1482. La mejora más grande que realizó en temas eclesiásticos durante su reinado, fue lograr la separación definitiva de la Metrópoli de Moscú con la de Kyiv. Casimiro fue sucedido por su hijo Alejandro Jagiellończyk.